Bueno compañeros, con retraso, pero allá va la crónica.
Domingo 29 de Junio carrera de open de Tarragona en Gandesa, se esperaba una mañana de calor, pero nunca podría llegar a imaginar que sufriría tanta.
Se da el pistoletazo de salida, estaba en el medio lateral del pelotón, y a los pocos metros de arrancar, al engranar el 44 salta la cadena por encima del desviador, teniendo que parar para volverla a poner, con tanta mala suerte que esta se clavo entre el plato y la biela, mientras el pelotón se iba alejando.
Lo arreglo y arranco, cuando yo entraba en la pista los veía que estaban ya subiendo el primer repechon, fuerzo para cogerles y en poco tiempo cojo a la cola del grupo, llaneamos y pronto llegaría el grupo de los máster.
La bajada, era bastante técnica así que cuando la cosa no estaba clara saltar de la bici y correr, (como todos supongo), aparte de ser técnica, no había mucho margen de error y si te caías te podías hacer daño de verdad, ya que la senda era muy estrecha; yo como había ido un par de días antes decidí desmontar los acoples para no tener ningún enganchón.
Cuando llegue donde tenía mi aguador, le pregunte a cuánto tiempo tenía el primer sub21 y este me dijo que a 3min, con lo cual era una distancia asequible y seguí apretando.
El problema vino en la 2a vuelta, que al tener que apretar tanto en la primera y por el calor que
para aquel entonces hacia, pues el cuerpo se resentía, siendo de tal manera que me empecé a
encontrar mal, me asficsiaba y no tiraba, empiezo a aflojar de manera considerable, tenía la 3a posición asegurada, así que no valía la pena perderla por intentar apretar.
Las rampas se hacían interminables, y después de una la otra.
3a vuelta cambio de botella y oooohhhh, agua fresca, que alivio, al pasar por meta me tiro encima todo un botellín de agua, el sobreesfuerzo de las 2 otras vueltas y el calor estaba pudiendo conmigo, la gente empieza a pasar y pasar y uno desesperado intenta continuar dando guerra pero era imposible.
Llegados a este punto que avanzaba mas "corriendo" más bien era dando pasos como podía, ya que no me aguantaba derecho, incluso en algún punto de la subida llegue a parar asfixiado de calor, mi único objetivo era llegar de una pieza a la meta, así que a tumbos y a pie iba haciendo una rampa tras otra.
La bajada, pues con la fatiga que llevaba encima fue más, montar encima de la bici y que ella me lleve que llevarla yo a ella, cuando en la pista me pidió pasó Marrasé y me pegue a su cola un ratillo, hasta la rampa de la hermita, de ahí a meta hice el recorrido solo.
Conclusión, circuito, duro, técnico y muchísima calor, fue un infierno para mí, mi reto personal fue acabar.

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